SISTEMA CONSTRUCTIVO PATENTADO II - EL REVOQUE

La tierra contenida entre las dos placas ultradelgadas de cemento, se comporta como un tapial muy rígido y estable, manteniendo las cualidades intrínsecas del elemento térreo y atenuando sus desventajas.
El revoque de cemento de una pared de adobe, de 15 hasta 20 mm de espesor, por su alta porosidad permite la transferencia de agua que poco a poco debilita la frágil cohesión entre la tierra y el cemento caraterizados como elementos de baja compatibilidad.
La cualidad higroscópica de la tierra hace que absorba la humedad ambiental a través de la cubierta cementicia; la citada característica es responsable del deterioro prematuro de los revoques de cemento que son permeables a la humedad. El proceso de deterioro comienza cuando se abate una lluvia que empapa el revoque externo de la pared, la humedad entonces penetra el revoque cementicio e ingresa a la tierra del adobe causando daños acumulativos.
La tierra humedecida aumenta de volumen imperceptiblemente levantando unos milímetros el revoque.
Cuando la tierra logra secarse se contrae, mientras tanto la porción cementicia del revoque no retorna a la posición original. La parte de la tierra que estaba unida al cemento, al separarse se disgrega y como polvo cae entre la rendija abierta. Otras lluvia traen nuevamente humedad y el ciclo se reanuda, con la diferencia esta vez que la tierra reubicada presiona mucho mas el revoque de cemento allí donde se había acumulado; ciclos continuos de humedecimiento y secado de la tierra, logran al final la ruptura del revoque.

Observando las deficiencias de la tierra en la forma de adobe y también de tapial, me propuse minimizarlas lo mas posible, manteniendo las ventajas naturales que hace de la tierra el elemento común en las construcciones de los pueblos desde tiempos ancestrales.

El revoque por tanto en mi modesto entender, era un empaque deficiente que podía ser mejorado o sustituido por otros materiales. Inicié por tanto las investigaciones estudiando las particularidades de la tierra con la que hacían el adobe y el tapial. En el tapial como en adobe, la tierra es preparada con 24 horas o mas de anticipación, de esta manera todo el conjunto ha recibido la suficiente cantidad de agua como para que el conjunto hidratado sea homogéneo. En los pueblos ancestrales y hasta ahora, se sigue adicionando muchos materiales que suponen ayudan a la cohesión de las partículas de barro.

La paja, restos de cosechas, pelos de animales, bosta de vaca, etc, son adicionados a la mezcla esperanza deimpedir el resquebrajamiento de la unidad lograda. Es de hacer notar que todos los aditamentos serían superfluos si se tomara en cuenta la proporción media de un adobe o tapial que consiste básicamente en arena 70%, arcilla 20% y limo 10%..
Las formulaciones para la fabricación mecánica del adobe se basan en la selección de calidad de los componentes térreos sin ningún otro añadido, el producto obtenido sin rajaduras, evitando adicionar cualquier otro elemento extraño a la arena, arcilla y limo.

Para el caso que nos ocupa, el barro con o sin aditamentos, debe ser un producto plástico que corra suavemente rellenando enteramente el espacio generado por las placas ultradelgadas de cemento. No debe quedar lugares sin relleno porque supondría una pared terminada deficiente y frágil ante impactos.

Seguramente los primeros habitantes que construyeron sus viviendas prescindiendo de las formaciones naturales, emplearon inicialmente ramas y cortezas de árbol que evolucionaron al incorporar el uso del barro como elemento de cohesión y protección de la materia vegetal.

La amalgama entre barro y restos de árboles, ramas y hojas, continua hoy en las distintas culturas a través del mundo.
Siguiendo en la historia, un otro paso de adelanto fue el empleo de láminas delgadas de piedra, huecas o rellenas de agregados, técnica constructiva que fue utilizada por los antiguos griegos (emplecton griego). Los Romanos perfeccionaron la técnica y mejoraron el emplecton griego mediante el opus caementicius, sistema constructivo que de manera práctica solucionaba los problemas de complejas edificaciones.

Las placas de cemento ultradelgadas es el equivalente moderno del emplecton griego, con el aditamento de los "pelos o barba" que actúan a manera de trabas continuas entre ambas placas y el relleno de barro. Los pelos o barbas hacen la diferencia fundamental y constituyen el núcleo del sistema constructivo, debido a que trabajan y conforman un bloque monolítico de alto rendimiento. Los muros de cerramiento logrados de esta manera son portantes para estructuras de un nivel, superando ampliamente las prestaciones de construcciones de adobe o ladrillo similares.
Es decir que los emplecton griegos fueron mejorados tecnológicamente hasta alcanzar las altas prestaciones que efectivamente ofrecen las placas de cemento del nuevo sistema constructivo.